Ayer, estuvo con nosotros el Padre Paúl, Celestino Fernández, que nos acercó a la vida de San Vicente, presentándolo como "El místico de los ojos abiertos" y nos explicó la importancia de dejarse mirar por los pobres para transformar el mundo.
Cómo educadores vicencianos, estamos llamados a educar a nuestros alumnos en el servicio a los pobres
¡Gracias por mantener vivo el carisma!